Alopecia en mujeres

Alopecia en mujeres: tipos, estigma y tratamientos recomendables.

Cuando hablamos de alopecia, solemos hablar de su forma más común, la alopecia androgénica, más conocida como calvicie común, básicamente la pérdida de cabello no estacional.

Aunque la alopecia androgénica es más común en hombres mayores, alrededor del 30% de las mujeres en todo el mundo padecen esta afección. Las mujeres sufren sus efectos en diferentes etapas de la vida, aunque los casos más comunes se dan a partir de los 30 años.

Se estima que alrededor del 20% de las mujeres entre 30 y 40 años sufren algún grado de alopecia, aunque sea leve. La alopecia femenina suele estar muy relacionada con tres causas principales: la pérdida de cabello estacional, la herencia genética o factores hormonales como los que se producen durante el embarazo, la lactancia o la menopausia. 

Aunque también existen factores externos, comunes tanto a hombres como a mujeres, que pueden incidir en la caída del cabello, como el estrés o seguir una dieta desequilibrada.

Tratamiento para alopecia

En primer lugar, debemos tener en cuenta el tipo de alopecia que se puede llegara presentar. Para ello, se debe acudir a médicos y clínicas especializadas. En la alopecia androgénica de tipo femenino, la solución puede estar en realizar un Trasplante Capilar. 

Un aspecto importante para saber si el paciente puede someterse a un trasplante capilar es saber qué tipo de alopecia tiene y si está estabilizada o no. También habrá que tener en cuenta si la pérdida de cabello es difusa o, por el contrario, está localizada.

En algunos casos, antes y/o después del trasplante capilar, si es el tratamiento indicado, puede ser necesario realizar tratamientos complementarios, como Mesoterapia o Plasma Rico en Plaquetas.

LEE TAMBIÉN:

ZUMOS QUE DETIENEN LA CAÍDA DEL PELO

CORTES DE PELO PARA MUJERES CON POCO PELO

En la alopecia femenina común (tipo androgénica), una de las técnicas más utilizadas es el trasplante con parcial. Gracias a esta metodología, una mujer puede someterse a un trasplante de cabello sin tener que afeitarse toda la cabeza, sino solo una pequeña “ventana” en la zona de la nuca, que puede cubrirse con el resto de su cabello, como un moño, una cola de caballo, etc. Esta es una gran solución ya que muchas mujeres no están dispuestas a mostrarse completamente sin pelo.

En el caso de las mujeres, el trasplante no siempre es la única opción, es decir, en ocasiones existen tratamientos médicos (mesoterapia capilar o plasma rico en plaquetas) o tratamientos específicos para alguna patología, como trastornos tiroideos o carencias de hierro y vitaminas que deben ser tratarse y regularse adecuadamente para mejorar los efectos de la caída del cabello.

Alopecia Areata, una enfermedad diferente

Si hablamos de alopecia areata, la alopecia que se dice que tiene probablemente Jada Pinkett Smith, la mujer de Will Smith, la incidencia se reduce al 2-3% de la población. En concreto, la alopecia areata es una enfermedad autoinmune que puede tener diferentes condiciones (incluida la genética) y ciertos desencadenantes, principalmente estrés, cambios de vida e infecciones, especialmente en la boca y los dientes. Si bien es cierto que no se conoce la causa exacta de la alopecia areata.

Se caracteriza por aparecer típicamente como zonas circulares, más grandes o más pequeñas, en las que todas las unidades foliculares (órgano productor de cabello) en esa área en particular dejan de producir cabello. 

La enfermedad puede limitarse a pequeñas "fallas" o estas áreas pueden luego converger, dando lugar a áreas más grandes de alopecia y, en los casos más severos, provocando la pérdida de todo el cabello e incluso de todo el vello corporal. La alopecia (en cualquiera de sus variantes) suele afectar, en mayor medida, a la autoestima de las mujeres que a los hombres.

En cuanto a la alopecia areata, el tratamiento es radicalmente diferente. Los tratamientos más utilizados son los corticoides (tópicos, infiltrados, sistémicos), inmunosupresores, inmunoterapia de contacto, tratamientos biológicos, etc.